...Mientras haya unos ojos que reflejen
los ojos que los miran;
mientras responda el labio suspirando
al labio que suspira;
mientras sentirse puedan en un beso
dos almas confundidas;
mientras exista una mujer hermosa,
¡habrá poesía!
Gustavo Adolfo Bécquer
DIECINUEVE DE DICIEMBRE
En estos versos que escribo,
hoy mis sentimientos duermen,
esperando que los leas
y que tu voz los despierte
con el rumor de la brisa
que de tu sonrisa bebe.
Cada palabra expresada
es un latido latente,
un grito de amor callado
guardado en mi pecho ardiente.
Hoy se sincera mi pluma,
en esta letras que vierte;
ya nada puede pararlo,
el corazón no comprende
de cadenas, ni ataduras,
sólo atiende a lo que siente.
Hoy te digo que te quiero,
como te he querido siempre,
entre los pétalos blancos
de la rosa que embelleces
con la luz de tu mirada
que mis ojos tristes prenden
para iluminar mi alma
que por tu amor desfallece.
Hoy, que tu sonrisa brilla,
diecinueve de diciembre,
en cada poema escrito,
en cada verso que lees
mi corazón se desnuda,
te descubro cuanto siente.
Datrebil
NO TEMAS LA MUERTE
El tiempo no se detiene,
los años pasan deprisa,
y la sombra con la hoz viene
para llevarse tu risa.
No entiende de distinciones,
de edades, ni de dinero...
consuma sus intenciones
con un azote certero.
Ella decide el momento,
cuando acaba la partida,
se lleva tu último aliento
y te arrebata la vida.
Antes de que llegue el día
y oscurezca tu mirada
deja tus ganas vacía,
no dejes sin hacer nada.
A su llegada no temas,
si el sendero has recorrido
dejando atrás los problemas,
viviendo como has querido.
Lucha con uñas y dientes
por tus anhelos y sueños;
pues sonríe a los valientes,
la fortuna en sus empeños.
Y no temas a la muerte
que silencie tu destino,
porque sé que tendrás suerte
hasta el final del camino.
No te faltará la mano,
el apoyo de un amigo,
un poeta sevillano
que siempre estará contigo.
Datrebil
TE QUIERO
Acaso crees, ¿qué nunca te dije te quiero?
Será que no escuchaste en los silencios,
que no oíste los latidos de mi corazón maltrecho.
Te lo he dicho cada vez que mi boca sella los labios
sin pronunciar palabra
que rompa el mágico momento del encuentro.
Te lo digo cada vez que miro a tus ojos
y se pierden los míos en tu angelical mirada,
espejo inequívoco del alma que tras de sí guarda.
Te lo diré cada vez que sueñe despierto
que mis besos acarician tu hermosa sonrisa;
aquella que me embriaga, que cautiva mi alma.
Te quiero... es el grito enmudecido
que expresa mi corazón enamorado
cada vez que estás a mi lado;
es el eco de cada cómplice mirada ,
de cada beso soñado, de cada verso escrito...
Aún ahora, ¿crees que no te lo he dicho?
Hasta el fin de los tiempos... Te quiero.
Datrebil
NO DIGAS NADA
Calla, no digas nada;
sólo guarda silencio.
No ves cómo se escapa
de mi pecho el amor;
con sus latidos clama
mi corazón herido
un halo de esperanza,
el fin de su calvario.
De a poco se desangra
en su lenta agonía,
las espinas clavadas
le arrebatan la vida.
Calla, no digas nada;
sólo guarda silencio.
No ves que tus palabras
visten de indiferencia
y me parten el alma,
mi corazón destrozan.
Si no lo sientes, calla;
sólo deja que muera.
Y aún sin decir nada
oye en cada latido
el amor que me mata...
siente cuánto te quiero.
Datrebil
QUISIERA FUNDIRME EN TU CUERPO
Quisiera tenerte cada noche entre mis brazos
fundiendo mi alma a la tuya
igual que la ola se aferra a la orilla
antes de ser por el mar engullida
desvaneciéndose en la arena
- sin zozobrar en el intento -.
Desnudarte con el susurro de suaves palabras
que embelesen tu oído,
mientras mis dedos recorren tu espalda
esculpiendo dulces caricias
y mis besos se deshacen en tu cuello,
terso y delicado,
embriagado de tu aroma
- sin imaginar el momento -.
Quisiera que tu piel fuera el papel
donde pueda escribir con mis manos
los poemas enamorados
que dicta un corazón ciego y loco,
amándote en cada verso impreso en tu cuerpo
hasta que la tinta embadurne tu alma y la mía
con los designios de la pasión y la locura
- sin que todo quede en un sueño -.
Datrebil
DEL LADO DEL CORAZÓN
Unos aman con la mente,
con latidos de cordura
recluyen a la locura
donde impera la razón;
yo no amo con la cabeza,
no entiende de sentimientos,
sopeso mis pensamientos
del lado del corazón.
Datrebil
TRISTESSE
Suenan acordes de piano
que me acarician el alma,
sus teclas lloran tristeza
aferrada a una sonata.
Impregnada de tu ausencia
vuelan sus notas amargas
en busca de mis oídos
que tu dulce voz aguardan,
irrumpen en mis adentros
lacerando mis entrañas.
Al son de la melodía,
por Chopin interpretada,
mi pobre corazón gime
su desconsuelo, sus ansias;
cruelmente sesga mi vida
esa distancia inhumana
que nuestros cuerpos aleja,
que nuestras almas separa.
Datrebil
GÉLIDA INDIFERENCIA
Lapidan mi alma las lágrimas secas
que tragan mis ojos tristes
anegados de fría indiferencia,
acuciada por el sangrante silencio de sus palabras,
por el esquivo reflejo de su mirada
al enmudecido grito de mis pupilas;
urgida por la transparencia de sus abrazos
aferrados a mi cuerpo con etéreas manos
que no alcanzan siquiera a rozarme.
Trágica indolencia provocada por su ausencia
socava en mis adentros los cimientos,
a los que me agarro como clavo ardiendo.
Se clava en mis entrañas cual puñales
el anheloso sabor de sus labios
lacerando cuanto encuentra a su paso,
se perpetúa en la almohada
los besos que fueron soñados
y que mi boca no llegó a probar.
Es la gélida indiferencia con la que me paga,
la afilada hoz que me acerca la noche eterna.
Datrebil
QUERÍA
Quería regalarte la estrella más hermosa
que jamás hayas visto/ en el oscuro cielo,
para que reflejara la más sutil belleza
cuando tus lindos ojos de cerca la miraran.
Otro obsequio te traigo pues no pude alcanzarla,
mis manos no llegaron por más que yo quisiera.
Te regalo una rosa que floreció en mi pecho;
sus pétalos son blancos, como el amor que evoca.
Mas no será una estrella, ni esté junto a la luna;
es una flor sencilla que muestra tu hermosura.
Datrebil
SI TU CUERPO FUERA EL MAR
Si fuera tu cara el mar,
en sus arrecifes bellos
dejarían sus destellos
mis ojos al zozobrar.
En sus hermosos corales
encallarían mis penas
y el canto de las sirenas
alejaría mis males.
Y tus suaves manos, el mar
que reporta hacia su puerto
mi corazón descubierto
para poder arribar.
Quisiera anclar en tus senos
el más cariñoso abrazo,
y sientas en tu regazo
mis latidos más amenos.
Ahogarme en tu sonrisa
de tibias aguas abiertas,
en tus miradas cubiertas
de la marinera brisa.
Y sumergirme en tus ojos
mientras se alzan hacia el cielo
en un anhelante vuelo
entre naranjas y rojos.
Si fuera tu cuerpo el mar
y el mío un barco velero,
en su oleaje ligero
yo quisiera naufragar.
Datrebil
TUS LÁGRIMAS SON ESTRELLAS
Después de mirar tus ojos
ya sé qué son las estrellas.
Son tus lágrimas amargas
que en el cielo se condensan,
vertidas con desconsuelo,
teñidas de gran tristeza;
porque te hiere la boca
que tus dulces labios besan.
En la oscura noche, niña,
tu desánimo reflejan
como el faro que previene
al barco que llega a tierra.
Solidarias con su luna
advierten a quien te quiera…
me iluminan el camino
para mitigar tu pena.
Datrebil
ES TU NOMBRE
Lejos del vacío de muchas otras palabras
que se dilapidan en el ensordecedor silencio
de nuestro mundo,
acaricia mi alma pronunciar tu nombre.
Es en la comisura de mis labios
el tierno beso que anheloso espera
el cálido roce de tu boca,
suave melodía que embriaga mis oídos
y hace vibrar el corazón que cela mi pecho.
Es el ángel que bate sus alas en mis sueños
buscando cobijo en el arrullo de mi voz;
el latente recuerdo subyugado a mi mente
que ocupa los blancos de mis pensamientos…
Es tu nombre, mujer, aún en voces ajenas
la evocación de tu presencia en mi memoria,
el sosegado eco que marca el son de mis latidos.
Es el alegre trino de un pájaro soñador
que busca su dicha en las nubes blancas
de un cielo exasperado,
mientras surca vientos de esperanza y amor…
Datrebil
OÍR TU VOZ
Es tu voz melosa, la oportuna ola
que impulsa al náufrago a la orilla
cuando un mar embravecido se dispone a engullirlo
y las fuerzas ya le fallan.
Es tu voz sosegada, la gota de rocío
que calma el hastío de plantas y flores
casi marchitas por el calor de la tarde.
Es tu voz profunda, el suave susurro de viento
que acaricia las alas de los pájaros
mientras alzan el vuelo y surcan los cielos,
libres como los sueños.
Es tu voz dulce y pausada, el anhelado beso
que sacia la sed de mis labios
embelesando inevitablemente mi cuerpo y mi alma.
Oír tu voz...
es el eco que sustenta mi memoria,
el suspiro de aliento que falta en mi pecho.
Oír tu voz...
es sentir la música celestial de los ángeles,
el penúltimo latido que me aferra a la vida.
Datrebil
LA ÚLTIMA CANCIÓN
Rompe el bullicioso silencio de la noche,
desempolvando notas olvidadas,
el triste lamento de un viejo saxofón
que entonan amorosas sonatas.
Lloran somnolientas las cándidas rosas
que adornan en el balcón las regias balaustradas;
sus lágrimas se precipitan al vacío,
agónicas por el son y su nostalgia.
En Dios busca la gente la respuesta
con miradas atolondradas,
embriagados por el místico devenir
de las volátiles notas que escapan por la ventana.
En la fría habitación del ático
donde suena la última balada
caen los pensamientos esperanzados
a un teclado con letras medio borradas;
se quiebran los versos de un loco soñador,
la triste tesitura llega al final con la mañana.
Ya no se oyen los armoniosos latidos
de un corazón que amor reclama.
Datrebil
¿QUÉ ES POESÍA?... SIN TU RISA
Qué es poesía preguntaba
Bécquer, mientras observaba
las pupilas azuladas
de una encantadora dama.
Mis tristes ojos se clavan
hoy en tus pupilas pardas
para decir sin palabras:
es poesía tu mirada.
Eres tú, mi niña guapa,
la poesía que me embarga,
aquella que llega al alma
y de loco amor me mata.
Miguel Hernández exclama,
en unos versos que atrapan,
que la risa de su amada
le hace libre, le da alas...
Es la curva dibujada
en dulces labios de nácar
tu sonrisa sevillana,
mi libertad anhelada.
Eres tú, mi niña amada,
esas alas que me alzan
a las nubes que soñaba
donde sólo tú me amas.
Datrebil
AMAR Y QUERER
Amar es sentir el viento
cuando despeina tu pelo;
pasar el día soñando
y saber que estás despierto.
Querer es volar sin alas
por el confín de los cielos;
saber que no habrá distancias
que detenga nuestro vuelo.
Amar es creer que el mundo
se ha parado por completo
cuando ves esa mirada,
que ilumina tu universo.
Querer es mirar tus ojos
y rendirme a su destello
perdido por su belleza,
mientras desafío al tiempo.
Amar es sentir la lluvia
resbalando por tu cuerpo
como una dulce caricia
repleta de sentimiento.
Querer es llorar por verte
cuando en frente no te tengo;
es ser la lágrima clara
que sequen tus suaves dedos.
Amar es mirar de noche
toda la magia del cielo
y ver como se refleja
la luna en el mar inmenso.
Querer es ver las estrellas
brillando en el firmamento
y creer que son hermosas
porque trazan tu reflejo.
Amar es oír con calma
cada sonido en silencio
y creer que entre susurros
te están diciendo te quiero.
Querer es soñar contigo
mientras te digo te quiero
y saber que cada noche
yo sólo contigo sueño.
Melancolía y Datrebil
¿POR QUÉ BRILLAN LAS ESTRELLAS?
Yo siempre me preguntaba:
- ¿Por qué brillan las estrellas?
Hoy que te miro a los ojos
y me ciegan su lindeza,
puedo decir convencido:
- ¡He encontrado la respuesta!
Es la luz de tus luceros
que en la Luna se refleja;
es el viso de sus lágrimas,
que en la oscuridad destella
el candor de tu mirada
a merced de tu belleza,
iluminando la noche
con millones de centellas.
Clama al cielo su desdicha,
encelada se lamenta;
llora Diana por saberse
que tú, niña, no más bella.
Datrebil
“En asuntos de amor los locos son los que tienen
más experiencia. De amor no preguntes nunca a los
cuerdos; los cuerdos aman cuerdamente, que es como
no haber amado nunca”.
Jacinto Benavente
QUIERO SER UN LOCO
Hoy la nostalgia nubla mi razón,
se apodera de mi alma la locura
que regresa con alas desatadas
arrullando mi ciego corazón.
Dialoga con Morfeo mi cordura
adulada por ninfas y por hadas
con palabras calladas,
con susurros de viento.
En mi locura siento
que se esfuman los sueños y la vida
para poder cumplirlos, disfrutarla...
para poder vivirlos, consumarla...
desafiando así al tiempo que no olvida
borrar de la memoria de los cuerdos
las buenas experiencias, sus recuerdos...
Duerma en mí la mesura del prudente,
despierte el desvarío del demente.
Datrebil
INDIFERENCIA
Dime qué puedo hacer, mi viejo amigo,
si en otros ojos busco la mirada
que en mis retinas se quedó grabada
y no puedo tener aquí conmigo.
Dime cómo encontrar mi flor amada
si no consigo oler ni su fragancia,
si retumba en mi oído la distancia
donde mi alma zozobra ya cansada.
Acaso, no recuerdas su importancia,
por ella se atenúan tus latidos,
por ella nos hallamos tan heridos;
sin ella, nada tiene relevancia.
Por los caminos del amor, perdidos
anduvimos buscando la razón
que incitaba en nosotros la pasión
para morir por ella enardecidos,
para vivir con la desilusión
de sabernos desdén de sus olvidos.
Datrebil
TU RECUERDO
Vive en mí tu recuerdo,
me sigue a todos lados,
como la sombra al cuerpo que camina
tras sus errantes pasos.
Y siento tu presencia;
mas no pueda rozarte con mis manos.
Estás en el aroma del café;
en un sencillo verso recitado;
en las miradas de la gente errante
donde busco tus bellos ojos pardos;
en la liviana brisa;
en el cálido abrazo
que no tocó tu piel,
que cada fría noche fue soñado.
Detrás de una sonrisa
dibujada en un cuadro picassiano;
del anhelante beso
de los enamorados;
detrás de una canción
que empieza con acordes para piano...
Vive en mí tu recuerdo,
mas rozarme no puedas con tus manos.
Datrebil
CON TU SONRISA ME QUEDO
Por si la ahogan las penas,
el dolor y el desconsuelo...
Por si la borran las lágrimas
o el raudo paso del tiempo...
Por si pierden tus ojitos
las ganas de ver el cielo...
Por si se enfrían tus labios
con el penúltimo beso...
Por si vuela hacia el olvido
con el susurro del viento...
Por si en mi triste mirada
no descubre su reflejo...
Por si el destino te aleja
y gozarla ya no puedo...
Por si muero en tu memoria
y en tus sueños no aparezco...
Por si paran mis latidos...
con tu sonrisa me quedo.
Datrebil
SI PUDIERA ALCANZAR LAS ESTRELLAS
Si pudiera alcanzar las estrellas
que iluminan tu dulce mirar,
dejaría la noche sin ellas
para podértelas regalar.
Datrebil
CON SÓLO DOS PALABRAS
Un poeta inspirado podría reflejar
con escasas palabras, apenas unos versos,
todos los sentimientos que en sus entrañas guarda:
un amor alcanzado, tal vez un loco sueño...
Como no soy poeta que las musas ayuden,
en un único verso te diré lo que siento;
mi sincero sentir, en él queda guardado
para que cuando quieras, siempre puedas leerlo.
Apenas ocho letras, tan sólo dos palabras...
En el último verso desnudo mis adentros,
con la frase más simple, con la que más expresa.
Con el corazón grito: amor mío, "TE QUIERO".
Datrebil
EL VERSAR DE MI POESÍA
Una canción de amor enmudecida,
un silencioso grito,
una lágrima triste derramada,
una ilusión perdida,
un corazón marchito,
una trémula y cómplice mirada...
envuelve la poesía.
Una simple palabra cariñosa,
una sonrisa escrita,
un último latido enamorado,
unos hermosos pétalos de rosa,
un sueño que dormita,
un beso acariciado...
componen el versar de mi poesía.
Datrebil
ANHELO AL TROTE
Matizan las nubes blancas
el intenso azul del cielo;
en las cristalinas aguas
de un mar en calma, sereno,
se reflejan cual pintura
impresionista en un lienzo.
Se diluyen en la orilla,
engullidas por el tiempo,
las leves olas saladas
que flirtean con el viento.
Con impetuoso galope
de aproxima de lo lejos,
surcando la arena clara,
un hermoso corcel negro
cabalgado por un loco
turbado de sentimientos.
Bello caballo andaluz,
de pelo azabache intenso,
sus crines dejan estelas
como los sentidos versos
de un poema atribulado
en un pergamino etéreo,
escritos por un poeta
que de amor se va muriendo.
Un suspiro a cada paso,
a cada trote un anhelo;
fiel alazán y jinete
buscan alcanzar su reto:
Fundir sus almas rampantes
en el añorado encuentro
con el alma inmaculada
de la dama de sus sueños.
Datrebil
LA VOZ DE MI SILENCIO
No es mi boca la que evoca
el amor por el que muero.
Es el eco enmudecido
de sinceros sentimientos;
el latir de un corazón
lacerado por el tiempo,
por los golpes de la vida,
por el frío del invierno.
Es el pálpito incesante,
la esperanza y el anhelo,
la verdad de mi palabra,
el sentir de mis adentros
y las lágrimas del alma
que dibujan en un lienzo,
con colores de ternura,
el amor por el que muero.
No es mi boca la que evoca
la pasión de lo que siento.
Es la pluma liberada
de mentiras y secretos
que desnuda sin reparo
mis sentires y mis sueños.
Son los pétalos de rosa
impregnados en los versos;
el susurro de las alas,
arrullado por el viento,
de una bella mariposa...
Es la voz de mi silencio.
Datrebil
TU TRISTEZA
Es tu doliente tristeza
el filo de la navaja,
despiadadamente frío,
que desgarra mis entrañas
en diminutos jirones
de piel vacía, sin alma.
Como pétalos de rosa
caen tus lágrimas claras,
se despeñan al abismo
resbalando por tu cara;
el penúltimo suspiro
a su paso me arrebata.
No puedo verte sufrir,
tu tristeza me socava;
deja mi cuerpo baldío,
pues mi corazón apaga.
Sólo tu bella sonrisa,
la alegría en tu mirada
avivará nuevamente
en mis adentros, la llama.
Datrebil
UN POEMA CUALQUIERA
Abren puertas y candados
de corazones cerrados,
los versos apasionados
de un poema.
Cierran úlceras y heridas
de errantes almas vencidas,
las letras enternecidas
del poeta.
Despiertan sueños dormidos
entre sábanas de olvidos,
los versos enardecidos
de un poema.
Duermen tristezas mojadas
con lágrimas desgarradas,
las letras enamoradas
del poeta.
Sentimientos encontrados
en papeles expresados,
los versos esperanzados
de un poema.
Experiencias reflejadas
como sombras invitadas,
son las letras desveladas
del poeta.
Datrebil
QUISIERA PODER DECIRTE
Con el corazón abierto,
quisiera poder decirte
que el amor es un invento
o que ni siquiera existe.
Que es simple dolor de pecho
la angustia que dentro sientes
y no un flechazo certero
que tu corazón malhiere.
Si te aliviara con ello,
quisiera poder decirte
que el amor es un invento
o que ni siquiera existe.
Que yo en el amor no creo
y que en mi entrañas no vive
un sentimiento sincero
que sólo por ti persiste.
Que no siento en mis adentros
lo mismo que por él sientes,
pues dejó de ser secreto
que el maldito amor nos hiere.
Con estos dolientes versos,
quisiera poder decirte
que el amor sólo es un sueño;
pero no puedo mentirte.
Datrebil
ENTRE EL AMOR Y EL ODIO
Entre el amor y el odio
sólo hay un paso;
sentimientos opuestos
y tan cercanos.
No lo recorras,
el corazón se apaga,
el alma llora.
Datrebil
"Quien aleja su mano del rosal por temor a las heridas que pueden causarle las espinas, jamás podrá agradar a nadie con el obsequio de una bella rosa..."
Anónimo
NO TEMAS SUS ESPINAS
Quien aleja su mano del rosal
para que no le pinchen las espinas
morirá sin saber cuán de especial
es sentir de las flores, las más finas.
El tacto de las rosas, su dulzura,
evoca la pasión de los sentires,
un placer que te llena de ternura;
que no conocerás, por más que mires.
Sus manos no tendrán ninguna herida,
mas no percibirá jamás el gozo
de poder regalar la flor prendida
con mimo, con amor, con alborozo...
Regálale a quien quieres una rosa
y la harás la persona más dichosa.
Datrebil
LUJURIA
Hay que arrojar leña al fuego
para mantenerlo vivo;
ya que si no se alimenta,
acabará extinguido.
Hay que avivar el amor
con sexo todos los días;
la pasión se desvanece
si duerme en sábanas frías.
Datrebil
ROSA Y MAR
Con muchísimo cuidado,
pega el oído a su concha
y podrás oír el eco
que guarda la caracola.
Oirás el viento del sur;
el devenir de las olas,
que se funde con la orilla,
que se enfrenta con las rocas...
Podrás sentir el cariño,
el amor que dentro arropa
por sus olas, por el mar;
y en silencio rememoras.
No sólo guarda el amor
en su ser, la caracola;
pues también puedes sentirlo,
en los pétalos de rosa.
Se percibe en su elegancia,
en el candor de sus hojas;
y si la nariz acercas,
en su delicado aroma.
Impregnada de rocío
su belleza te impresiona,
despuntando la mañana
su ternura te enamora...
Mas si colocas la mano
en el pecho que te evoca,
podrás sentir el amor
que mi corazón implora,
con su callada palabra,
por el mar y por su rosa.
Datrebil
GIRANDO EL TIEMPO
Veo el tiempo pasar...
y a contrasentido girar nuestro mundo...
Y no creas
que no quisiera detener las agujas
que marcan nuestro camino,
para que el latido de tu corazón
se perpetúe en el silencio del cielo,
allá donde puedas encontrar
frondosas nubes por las que poder pasear...
Y parar el mundo con mis propias manos,
cambiar el viento que lo empuja
para que puedas soñar al son de la brisa
que acaricia tu alma.
Y ser, sin más,
la volátil sombra en tu lindo volar.
Datrebil
CUÁNTO AMOR
Cuánto amor silenciaron mis palabras
y gritaron mis versos, mi mirada.
Cuánto amor envolvió mi voz callada...
Quizá me falte mucho por decir.
Cuánto amor exclamaron mis poemas
y callaron mis labios, los olvidos.
Cuánto amor desnudaron mis latidos...
Quizá me quede poco por sentir.
Datrebil
TODAS LAS MAÑANAS
Como todas las mañanas,
después de haberte soñado,
te imagino, ya despierto,
entre los pétalos blancos
de la rosa más hermosa
exaltando tus encantos.
Un círculo luminoso
te recubre con un manto
de resplandeciente luz
que invoca buenos presagios;
es el aura, de quien versa
sus sentimientos guardados,
que te abraza con ternura
procurando tu descanso,
augurando para ti
el más apacible paso
por este difícil mundo
en el que nos encontramos.
Como todas las mañanas,
después de haberte soñado...
te imagino complacida,
despertando entre mis brazos.
Datrebil
EN MI LOCO CORAZÓN
Allí donde sus miradas quedan grabadas
cuando son los ojos del amor los que miran
buscando su reflejo en otros que tanto ansían.
Allí donde se clava su hermosa sonrisa,
cual si fuera una hiriente espina
de la más bella rosa del jardín.
Allí donde el leve ondear de su pelo
mesado por el suave viento
queda como caricia liviana y tierna.
Allí donde la tonalidad de su piel
viste de cálido color las cuatro paredes
de mi perpetua prisión acompasada.
Allí donde dibuja su estilizado talle
curvas que quitan el sentido
con nada más que imaginarlas.
Allí donde dejan marcadas sus huellas
cada elegante paso en su caminar errante,
dirigidos por un caprichoso y vil destino.
Allí donde mis silencios son el eco del amor,
sentimiento de mudas voces y sordas palabras,
latidos de la pasión que por ella siento.
Allí es donde se encuentra todo mi ser,
donde ella permanecerá por siempre...
en el corazón de un loco soñador.
Datrebil
TUS BESOS SUEÑO
Cada noche siento
recorrer mi boca,
un dulce hormigueo.
Son tus labios tiernos
que rozan los míos;
sí, por ellos muero.
Sueño con tus besos,
me roban el alma,
incluso despierto.
Susurro del viento,
caricia de amor,
un sentir intenso.
No quiero otros besos,
no sueño otros labios;
tan sólo tus besos.
Datrebil
LOCO POR TI
En tus ojos se funde mi mirada,
perdida en el destello penetrante
del alma que reluce cual diamante;
detrás de tus luceros resguardada.
En tus labios se pierde mi cordura,
parece que me llaman mudamente,
parece que te beso dulcemente;
borracho del licor de mi locura.
En tu sonrisa muero mansamente,
ensimismado admiro su belleza;
refugio de mis lances de tristeza,
en ella se disipan velozmente.
En tu piel mis anhelos se consuman
con el mínimo roce despojado;
sueño de un pobre loco atribulado,
bálsamo de las penas que lo abruman.
Estoy loco de amor y de pasión
- en el amor no cabe la mesura -;
pues sólo sé amarte con locura
- no hay razón que detenga al corazón -.
Datrebil
SENTIMIENTOS EN VERSOS
Se asoma a la ventana, su mirada se pierde,
por los ojos vacíos el alma se le escapa.
Entre pétalos blancos, entre rosas y espinas;
su corazón se ahoga, en su pecho se clavan.
Adormece en sus labios, por irrumpir ansiosas,
las palabras que evocan un puro sentimiento
con ternura guardado/ y que por ella vive
más allá de los sueños, más allá de su tiempo.
Amor enmudecido por el atroz destino
que separó sus cuerpos y distanció sus almas.
Amor correspondido con solo una sonrisa,
un expresivo gesto, una simple mirada.
Se consumen los días entre letras mojadas,
languidecen las horas del reloj de la vida;
mientras un pobre iluso, aprendiz de poeta,
expresa por escrito sentimientos con rima.
Marchitará la rosa, fenecerá el poeta;
mas quedará su aroma, persistirán sus versos;
allá donde haya amantes, allá donde haya amor,
en las suaves caricias, en los ardientes besos.
Datrebil
MÁS ALLÁ DE LA ROSA
Sus pétalos no son hojas sencillas,
envuelve en sus entrañas la belleza
del rostro de mujer con sutileza,
es ávido rubor en sus mejillas.
No refleja su tallo la simpleza,
pues dibuja con mimo la hermosura
del cuerpo de mujer y su ternura,
como un genial pintor de gran destreza.
Abriga su fragancia la frescura
del alma de mujer, siempre dichosa.
Encarnada en la rosa más hermosa,
la mujer nos regala su dulzura
cautivando la mente sin mesura,
robando el corazón desaforado
de aquel que la recibe enamorado.
Más allá de la rosa puedes ver
el alma delicada de mujer,
en sus espinas llévalo impregnado.
Datrebil
TENGO CELOS Y SIENTO ENVIDIA
Tengo celos de mi boca cuando menciona tu nombre,
celos de mi propia voz que lo susurra muy suave;
siento envidia de mis ojos cuando roban tu mirada
de los preciosos luceros que relucen en tu cara.
Tengo celos de mis manos cuando acarician tu piel,
mas sólo dure un instante,/ es para mí suficiente;
siento envidia de mis labios cuando trazan en tu boca
el dibujo más hermoso, tu sonrisa inusitada.
Tengo celos de mi pecho, pues guarda mi corazón,
aquel que late por ti como por ninguna otra;
siento envidia de mí mismo por amarte demasiado,
envidia de mi locura que por siempre te hará suya.
Datrebil
VERDAD ESCRITA
La vida es una mentira,
la gente sólo te dice
la verdad a medias tintas.
Con elocuentes palabras,
aquello que dentro sienten
hábilmente lo disfrazan.
Te engañan con las verdades
que uno no quiere creerse,
creyendo las falsedades.
Mas si callo lo que siento
es, pues, para no mentirte
diciendo cuanto te quiero.
Prefiero dejarlo escrito
en un sentido poema,
son sus versos mis latidos.
Mi corazón nunca miente
cuando por tu amor palpita,
es el son de lo que siente.
Datrebil
HAIKÚ A TU SONRISA
Es tu sonrisa
en el arduo verano,
la mejor brisa.
Datrebil
EN MIS OJOS
En mis ojos, tu sonrisa
queda por siempre grabada;
jovial, dulce y delicada,
mi corazón la requisa.
Es la caricia de brisa
que estremece mi mirada;
en mis ojos, tu sonrisa
queda por siempre grabada.
No corra el tiempo deprisa,
quede la vida parada;
perdure en ellos tallada
con el amor que precisa.
En mis ojos, tu sonrisa.
Datrebil
NO ES DIFICIL ENAMORARSE DE TI
De entre todas la mujeres,
pues de ti me he enamorado;
mas, no fue muy complicado
conociendo como eres.
Me dejaste obnubilado
con tu preciosa mirada,
en tus ojos reflejada
el alma que Dios te ha dado.
En tu sonrisa endulzada
naufragaron mis sentidos,
aceleró mis latidos
su belleza inusitada.
Alguna vez, envidiada
por tu manera de ser;
ellos no supieron ver
en ti, toda tu grandeza,
tu corazón, su pureza.
La esencia de mi querer.
Datrebil
TUS LÁGRIMAS
Vi tus lágrimas caer
por el desamor vencidas,
arrojadas al vacío
desde tus suaves mejillas
como los pétalos blancos
de una rosa que marchita
los precipita a la arena
secos, baldíos, sin vida.
Gotas de mar en tus ojos,
sorbos de agua cristalina
entristecen tu mirada,
dolor refleja en la mía.
Lágrimas de un alma en pena,
que ya camina perdida,
humedecieron tus labios,
anegaron tu sonrisa.
El paño que las secara
devolviéndote la dicha,
quisiera llegar a ser
para regalarte, amiga,
la felicidad que anhelas
y que mi sentir cultiva.
Datrebil
SUEÑOS
Cuántas lágrimas vertidas
y cuántos sueños perdidos
no encontraron su legado,
quedaron en el camino.
Recorren etéreos mundos
al límite del olvido,
estériles se evaporan
entre sábanas de lino.
En la mudez de la noche,
donde el azar es esquivo,
desnúdase la esperanza
vestida en sordos suspiros.
Quiebra el gélido silencio
la sonoridad de un grito,
es el eco desgarrado
del penúltimo latido;
muere el yermo corazón,
acaba su cruel periplo.
Se desvanecen los sueños,
sí, nunca fueron cumplidos;
pero dejarán su estela,
pues los soñó como quiso.
Datrebil
TU JARDINERO
Quisiera ser un dócil jardinero,
el que cuida la rosa con sus manos
sin el necio desdén de los ufanos
entregándole amor pleno, sincero.
Aquel que la defiende por febrero
de afilados cuchillos y tijeras,
de vanas ilusiones y quimeras.
Quien arrulla sus pétalos sedosos
recitándole versos animosos
con palabras sentidas, sin fronteras.
Datrebil
SILENCIOSA VOZ
Cadenciosamente lánguidos los latidos,
resuenan en la sinuosidad del sosiego
con la llegada del encuentro.
Ausente, distante ella;
descorazonado, afligido él...
enfrentan la mirada, resbala la sonrisa.
Quiebra la serenidad de la noche
el lamento desgarrado
de un triste y torpe corazón,
por un ilusorio amor lacerado,
que derrama en suspiros de sangre
los anhelos por su amada.
Sus ojos resuenan el eco de su alma,
delicada, pura como ninguna;
mas no dicen cuanto oír quisiera...
Gritan, en cambio, las verdes pupilas,
el incondicional sentir, abnegado y sincero
del loco soñador que baña con su pluma
de desangeladas letras el versar que vislumbras.
En el impávido estruendo del silencio,
allá donde palidece el alma
quebrada por las crueles espinas de rosa,
se oye entre sordas palabras
la muda voz del sentimiento.
Expresa su mirada,
el amor que sus labios callan.
Datrebil
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